Monitoreo Remoto de Sistemas Automáticos de Fabricación

Introducción

En la era actual, los procesos automáticos son fundamentales en la industria manufacturera, impulsados por la eficiencia y la capacidad de producción que ofrecen las máquinas. Sin embargo, a pesar de su autonomía, es imperativo contar con un monitoreo constante para detectar posibles errores y analizar el rendimiento de las máquinas. En este contexto, el monitoreo remoto se presenta como una solución esencial para garantizar operaciones sin contratiempos.

Preparación.

Antes de iniciar el monitoreo, es crucial definir los aspectos específicos que se supervisarán en el proceso o máquina. Una vez determinado, la elección de los sensores adecuados es clave. Pueden incluir sensores de pulsos, corriente alterna, voltaje o señales analógicas. Además, se requerirá un dispositivo capaz de recopilar y registrar esta información, como un datalogger o un PLC, permitiendo el registro de datos y la emisión de alertas cuando sea necesario.

Dispositivos.

Teracom ofrece una gama de sensores que se ajustan a diversas necesidades. Ejemplos incluyen el TDI340 para la medición de pulsos, el TSC200 para corriente alterna, y el TSV300 para voltaje AC. Para el registro de datos, el TCW241 de Teracom es un datalogger eficiente, con capacidad para hasta 24 registradores y soporte para protocolos como SNMPV3, Modbus TCP/IP y NTP.

Monitoreo

Contar con un espacio centralizado para visualizar la información es esencial. Softwares de adquisición de datos como el Remote Monitoring Software de Teracom que permite graficar señales, mantener registros históricos, configurar alertas y otorgar acceso a múltiples usuarios. Alternativamente, soluciones como el Ultimate Access de Cimon ofrecen flexibilidad en la configuración de la interfaz, siendo ambos sistemas altamente efectivos para aplicaciones de monitoreo en tiempo real.

Conclusiones.

El monitoreo remoto de sistemas automáticos de fabricación no solo es una necesidad, sino una estrategia para optimizar la eficiencia operativa. Al emplear tecnologías como las ofrecidas por Teracom y Cimon, las empresas pueden garantizar un funcionamiento continuo, prevenir fallos inesperados y maximizar la productividad de sus procesos automáticos. La inversión en estas soluciones no solo es una medida proactiva, sino un paso esencial hacia la excelencia en la gestión de la producción.